Mensajes Recibidos por: Jean Luc Ayoun.
Se indica fecha y traductor en cada uno. En secuencia de abajo hacia arriba.
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Jesús Cristo |
CRISTO – MI CAMINO EN EL SENO DE LAS ESTRELLAS DE MARÍA
3 octubre 2010 - Traducción: Odilia Rivera
Recordatorio de Las 12 Estrellas de María Ver localización y esquema en el mensaje anterior del Blog. |
Hijos de la Fuente, bien amados, nosotros procederemos, juntos, a reactivar la Estrella colectiva y a continuación les daré mi camino en el seno de estas Estrellas.
Vibración AL
... Efusión Vibratoria...
Vibración Bien o Atracción.
... Efusión Vibratoria...
Vibración Claridad.
... Efusión Vibratoria...
Vibración IM, Aquí
... Efusión Vibratoria...
Vibración Unidad.
... Efusión Vibratoria...
Vibración Cristo.
... Efusión Vibratoria...
Vibración OD.
... Efusión Vibratoria...
Yo Soy AL. Vibración.
... Efusión Vibratoria...
Vibración Mal o Repulsión.
... Efusión Vibratoria...
Vibración IS, Ahora.
... Efusión Vibratoria...
Vibración Profundidad.
... Efusión Vibratoria...
Vibración Visión.
... Efusión Vibratoria...
Y Vibración OD.
... Efusión Vibratoria...
Yo soy Alfa, punto AL y Omega, punto OD
Yo soy el camino, punto IM
Yo soy la Verdad, punto IS
Yo soy la Vida, punto Cristo
Yo soy Bien y Mal
Yo soy Unidad, Claridad y precisión. Profundidad y Visión.
De esta reunión, mi Estrella es trazada dentro de esta frase: “Yo soy el Alfa y la Omega, yo soy el Camino, yo soy la Verdad y la Vida”
Vibración Luz y Fuego.
... Efusión Vibratoria...
Que la Paz y mi Paz les acompañe.
YO SOY Alfa y Omega. YO SOY el camino, la verdad y la vida.
Ustedes son Alfa y Omega. Ustedes son el Camino, la Verdad y la Vida.
... Efusión Vibratoria...
De Corazón a Corazón.
... Efusión Vibratoria...
Hasta Mañana
... Efusión Vibratoria…
Jesús Cristo
CRISTO – VOLVEROS HACIA VUESTRO YO SOY
Traducción: Susana Milan - 8 agosto 2007
YO SOY Jesús Cristo. Sois mis amigos. Yo os aporto mi Paz. YO SOY aquél que han llamado el Camino, la Verdad y la Vida. Yo he sacrificado mi vida para salvar la vuestra. “YO SOY” afirma mi presencia y no el “I Am” de la lengua inglesa que significa Maya: ilusión. YO SOY rey de amor, rey de eternidad, YO SOY príncipe solar. Vosotros sois yo. Más allá del lenguaje, más allá de Mi bendición, Yo os aporto Mi Paz. Yo os aporto “YO SOY”. Vosotros sois mis bien-amados. YO SOY (Yo he)* llegado a encender vuestra lámpara, porque YO SOY la Llama Eterna que arde en cada Ser. A través de Mi guía y Mi radiación, Yo os conduzco a mí para llevaros al Padre. YO SOY verdad, YO SOY la espada que corta. Yo vengo en este instante, más allá de la guía y la radiación que os aporto, a invitaros a volveros hacia vuestro YO SOY. En esto, las palabras y las frases que Yo emplearé serán concisas, cortas. Mi Camino es el Camino. Si ahora las palabras desean expresarse. Os escucho.
*[N. Tr] Dada la Vibración extraordinaria de YO SOY, respetaremos esta poderosa expresión cada vez que Cristo la utilice aunque, gramaticalmente en español no concuerde en el lenguaje corriente.
Pregunta: ¿cuándo será efectiva vuestra venida a la Tierra?
Yo Soy (Yo he)* venido ya. Yo vuelvo ahora en cada uno de vosotros. La forma en la que Yo me fui, Yo volveré. Las palabras más exactas, son que vosotros vendréis a mí. Esto es inminente.
Pregunta: ¿cómo venir a vos?
Volviendo a mí. Recorriendo mi camino. Sirviendo a los otros. Amando toda vida. No ocupándose de nada más que de Amar. Encendiendo la Llama de tu Templo, tú renacerás en mí y Yo renaceré en ti. Haciéndote muy pequeño. Engrandeciendo tu alma y tu Espíritu. Haciéndote puro. Siendo el Camino, la Verdad y la Vida, para todos aquellos que tocarán tus ojos y escucharán tus palabras. Descendiendo de la cabeza al corazón. Metiendo en la cabeza tu corazón. Metiendo en tu corazón, al niño. Proclamando y declarando: YO SOY.
Pregunta: ¿cómo purificarse?
Considerándose ya como puro. Adoptando mis vestiduras. Purificando sobre todo y principalmente lo que sale de vosotros. Como Yo decía, que vuestra mirada sea sin oprobio. Que vuestra palabra sea simple y justa. Que vuestro pensamiento sea sano, hacia los otros y hacia vosotros mismos. Se trata de una pureza de intención. Considerando lo que es importante es lo que sale de vosotros más que lo que entra. Aceptando vuestra Unidad, vuestra Llama y vuestra Divinidad.
Pregunta: acabáis de mencionar el hecho de adoptar vuestras vestiduras. ¿Podéis explicarlo?
Mis vestiduras son aquellas han sido lavadas en la sangre del cordero. Estos son los hábitos de la resurrección, los hábitos de pureza. Mis vestiduras son mi vibración que he venido a revelar por mi historia humana. Vosotros debéis vestiros de gloria, más allá de la pureza. Vosotros debéis vestiros de sol que calienta y nutre. Estas es lo que son mis vestiduras.
Pregunta: ¿“Ehieh” es parecido a “YO SOY”?
Ehieh es la vibración original. Es la autoconciencia de la divinidad. La segunda etapa es el YO SOY EL QUE YO SOY: Ehieh asher Ehieh, en todas las lenguas, exceptuada la lengua de la falsificación de “I Am”, la lengua de lo que llamáis vuestro comercio mundial. Del comercio con las fuerzas de la Sombra.
Pregunta: ¿debemos llamaros Jesús o Jéshua?
Lo importante es la llamada que formuláis con el corazón no con las palabras.
Pregunta: ¿qué significa identificarse con vos?
Esto significa, como Yo decía, poner tus pasos en mis pasos. Conocerme como Yo te conozco, preguntarme a cada instante, que mis ojos sean los tuyos, que mis manos sean tus manos, que tu Llama y mi Llama formen una. Esto se llama el último combate porque ciertas zonas de sombra inherentes a la encarnación pueden venir a oponerse a esto. Este proceso de identificación te permitirá matarme como modelo exterior, para dejar aparecer tu autenticidad. Este camino es idéntico para todo ser. Se trata del último combate, entre la voluntad de vida y la voluntad de Eternidad. Cuando la identificación es total, el modelo no tiene ya razón de ser. Tú habrás asimilado mi Esencia. Tú serás el YO SOY en totalidad. No habrá más diferencia ni distancia entre el YO SOY y tú. Así hay muchas almas que han seguido mi Camino. Por humildad muchos de ellos no han podido afirmarlo pero lo han manifestado a través de la Presencia. Se trata de un sacrificio libremente consentido. Diciendo YO SOY el Camino, la Verdad y la Vida que conduce al Padre. Esta ha sido una verdad absoluta. Esto significa también que en otras tradiciones, muchos seres han vivido este asesinato, este sacrificio y se han puesto mis hábitos. Incluso si no han llevado mi nombre, ellos eran yo. Hay que comprender que la distancia que ponéis entre vuestra Llama y mi Llama, representa la distancia que nos separa. A medida que esta distancia va coincidiendo, que mi Llama cubre vuestra Llama, vosotros lleváis mis vestiduras. Sois los depositarios de “YO SOY”, con toda humildad.
Pregunta: ¿eso corresponde a ser un Guerrero de Luz?
El Guerrero de Luz lucha por la Luz. Cristo es Luz. La etapa es esa que sucede a esta de Guerrero de Luz. En el orden de las jerarquías, el Guerrero de Luz Miguel viene antes de Cristo. Cristo se contenta con ser el Camino, ser la Verdad, ser la Vida. Su Presencia desencadena la guerra pero no es el Guerrero. La guerra de todos aquellos que rechazan la Presencia y que por lo tanto, la buscan, quizá más ávidamente que aquellos que están próximos a Mi Llama pero las heridas de la Vida han inducido un miedo de la Luz. Así pues no conviene juzgar, sino Amar, siempre y sin pausa. Y perdonar, porque ellos no saben.
Pregunta: ¿Buda y vos mismo están unidos en el mismo plano de Amor?
YO SOY (estoy) unido a todos aquellos que, después de mí, han seguido mi camino pero también a los que antes de mi, han precedido mi Camino. No obstante, la totalidad de mis vestiduras no han estado accesibles sino después de mi sacrificio y tampoco al que ha sido anterior a Mí.
Pregunta: ¿se puede decir que la venida de Buda ha sido una preparación a vuestra propia venida?
Él no es el único que ha dejado una huella fuerte. Pero otros han llegado, han precedido mi Camino: Abraham, Isaac, Jacob, David, y por otra parte Mani y muchos otros constituyen los avatares de mi Presencia, después. Yo he respondido a su llamada, a vuestra llamada y mi sacrificio ha sacralizado el planeta y toda la vida que, después de mí tomará vida.
Pregunta: ¿vuestra proposición que era “cada vez que os reunáis tres en Mi Nombre, yo estaré ahí”, sigue de actualidad?
Siempre de actualidad, pero hoy, cuando estéis reunidos ante mí, Yo estaré ahí. “cuando estéis tres reunidos en Mi Nombre, Yo estaré entre vosotros”, es la frase que Yo he pronunciado. Yo os digo también: “cuando seas Uno reunido conmigo”, Yo estaré contigo.
Amigos míos, una vez más, Yo os doy Mi Paz. Permaneced Unidos.
Jesús Cristo
CRISTO - YO VENGO PARA AMAROS
Traducción: Susana Milan - 29 Julio 2007
YO SOY Cristo, rey de amor, rey y señor de esta Tierra.
Queridos bien amados, debéis verme como vosotros mismos pero en otro momento de la gran corriente de la vida. Yo vengo este día a deciros la necesidad de unidad que tenéis. Fuera de la unidad nada bueno puede ocurriros.
Toda experiencia es, ciertamente buena de vivir pero no siempre os acerca a Mí. Las experiencias son necesarias durante un tiempo, este tiempo ha llegado a su término para aquellos que desean encontrarme. Yo he venido a recolectar mi cosecha de almas para llevarlas a la Fuente.
Me dirijo a aquellos que desean todavía tener experiencias de división, de la manifestación de la dualidad. Para éstos yo vengo también para aportar mi paz y la marca de mi amor en ellos para que jamás pierdan la noción de mi presencia en ellos. Sus experiencias enriquecerán, en otro tiempo, la fuente.
En fin, a todos vosotros, cualesquiera que sean vuestras elecciones, yo vengo para amaros, a mostraros que YO SOY. Yo vengo como amigo, para hacer callar definitivamente el maquiavelismo de algunas manipulaciones espirituales de las fuerzas de rebelión. Éstas serán ahogadas por el amor sin falla de Miguel.
Vengo diciéndoos “no tengáis miedo, yo estoy aquí” para que vosotros podáis ir libremente ahí donde os llame la vida, sin ser confundidos, sin ser manipulados, con un corazón ligero. La prisión de las ilusiones se callará a partir de ahora ahí donde posaréis vuestros pasos. Más que nunca el hijo no se dirigirá contra el padre, más que nunca el hermano no pondrá la mano sobre el hermano que mira a otro lado.
Se ha terminado la voluntad de mal, se han terminado los juegos oscuros, los juegos perversos y malignos, las tramas que asfixiaban vuestro impulso vital hacia la Fuente o hacia la experiencia.
Además vosotros sois libres totalmente, de vuestras elecciones de almas, de vuestras elecciones de encarnación y des-encarnación. Nunca más, ningún ser puede deciros de hacer algo que no queráis hacer. Esta libertad nueva puede dar miedo, lo sé, pero no estáis solos en estos primeros pasos hacia la nueva dimensión que viene. Seréis concentrados, reunidos, reagrupados, seréis protegidos y enseñados en las nuevas reglas. Esto se hará naturalmente, sin atascos, sin dificultades porque seréis diferentes a causa de la nueva vibración que nosotros difundimos en esta Tierra en este mismo momento.
En los próximos días, concretamente y sobre todo el 31 de julio 2007, día mayor durante este periodo, abríos al manto azul de María, de todas las María porque, durante este día de gracia recibiréis como nunca, esta divina radiación. Esta radiación que se nombra Madre- Fuente viene a vosotros para abrir y quitar el cerrojo a las limitaciones de vuestros códigos de ADN. Entonces, recibid el regalo inestimable y previo a vuestra ascensión transfigurante.
Esos códigos ya sin cerrojo permitirán a vuestros cuerpos densos hacerse luz en el momento deseado. Sentiréis la radiación primero en vuestra cabeza después, muy rápidamente, en el corazón. No tengáis miedo de la aceleración de vuestro corazón, esto es normal. Tranquilizaos y encontrad unos momentos a vuestro gusto para dejar actuar en vosotros esta divina gracia. Muchas limitaciones que llamáis enfermedades serán liberadas en este periodo de reposo.
Mis bien amados, os doy las gracias por aceptar esta gracia. Gracias por irradiar este mensaje en vosotros, en torno a vosotros. Gracias por estar tan cerca de mí. Yo os bendigo y os doy mi paz y mi amor eterno.
Jesús Cristo
CRISTO - VENGO A ACOGERLES EN MI REINO
Traducción: Odilia Rivera - 26 de Julio del 2007
Paz a vosotros, hermanos y hermanas en humanidad.
Vengo hacia vosotros como estaba previsto. Los días que vivís son los días donde la claridad y el discernimiento deben crecer en vosotros. En primer lugar reciban todo mi amor y mi bendición. Vosotros estáis, ahora mismo, en plena mitad del período de efusión de energía que se les da. Estos momentos se traducen por una necesidad vital, para algunos de vosotros, de estar alineados y centrados.
En cuanto su herramienta mental entra en acción, la claridad y el discernimiento se alejan. Es necesario, durante algunos días de vuestro tiempo, poner esto último en segundo plano de vuestra conciencia. Numerosas informaciones, numerosas olas de energías vienen a chocarles en todos los sentidos del término. Ese choque es, ciertamente, un choque de amor puro, pero viene también a revelar vuestras sombras agazapadas dentro de lo más íntimo de vuestro subconsciente.
Una vez más, no juzguéis más, no se adhieran a ellas. Obsérvenlas como alguna cosa que se manifiesta e inmediatamente se elimina de vosotros. No las retengan, no se aferren a nada. La luz viene a limpiar vuestros vestidos de luz, es pues totalmente normal que estas sombras sean traídas a la luz en este momento mismo pero, de gracia, ellas ya no les pertenecen más. No las dejen invadirlos o volver de nuevo hacia ustedes.
Mis bien amados, es indispensable no dejar esos pensamientos desencadenar emociones. Es igualmente indispensable hacer callar todo eso que podría obstruir la recepción de esta luz espléndida en su corazón y en su corona. Dejaos hacer por mí y no por el barullo que ellas implican.
Mis bien amados, hijos del Padre y de la Fuente, vengo a asistir a vuestro despertar en mi luz, vengo a acogerles en mi reino. Eso es, ahora, eso no es mañana, manteneos listos, manteneos de pie, fuertes, firmes, y llenos de luz. Absolutamente nada debe desviarles de su tarea sublime del momento. Ningún lazo de ninguna clase puede frenar vuestra aspiración hacia la Fuente. Ningún hermano puede ni debe desviarles de mi santa cara.
Sé también que muchos de vuestros hermanos no saben aún cómo hacer para descartar los velos de sombras revelados por la efusión de luz, pero qué más da. Ámenlos, necesitan aún más ayuda que vosotros, lo que hagáis por ellos, la Fuente se los regresará centuplicado. No tengan temor. No dejen sus velos del momento sombrear su luz. Creced, atrévanse a iluminar su Tierra con su mirada, con su presencia de vuestro “YO SOY”. Mis bien amados, tengo confianza en vosotros que me leen, para retransmitir eso, para intentar y realizar el despertar de mi luz.
En estos días bendecidos donde la luz desciende, deben subir hacia ella, reducir vuestro peso, vuestros apegos. El mental discriminando, tan útil en otras circunstancias, es en estos días, el obstáculo más pernicioso puesto sobre vuestra ruta para encubrir la luz que viene y sobre todo lo que sois. Entonces les pido no volver a entrar en conflicto, ni con vosotros mismos, ni con la sombra, ya que esta última se alimentaría con vuestra luz. El hecho simplemente de aceptar ser, aceptar recibir, aceptar el amor en vosotros y a vuestro alrededor, respondiendo por la luz a toda solicitud.
Extender esta luz es vuestra tarea divina: volverse un sembrador de luz a fin de hacer germinar el despertar y el reavivamiento de mi presencia. Yo no os he abandonado jamás. Solo vuestra mirada no se refería ya a mí, solo vuestro dolor y vuestras lágrimas os impedían verme. Pero ahora no es posible ocultarme, no es posible encerrarme en cualquier iglesia ya que vengo como me fui. Vengo en majestad con todas las luces de los universos luminosos a liberarles.
Paciencia, mis bien amados, velen y rueguen, sigan siendo lúcidos, sigan siendo hermosos ya que es como eso que yo los veo. No hay mas pecado, no hay mas falta, solo hay la gloria del padre en camino de alta velocidad hacia vosotros. Solo hay vosotros y vosotros, vosotros con vosotros, vosotros frente a vosotros, vosotros conmigo, vosotros en mí, nada mas puede ni debe haceros llorar. Solo mi divina presencia debe ocupar vuestra consciencia.
YO SOY vuestro baluarte, YO SOY vuestro rumbo, YO SOY vuestro cielo, YO SOY vuestro amigo, YO SOY vuestro hermano.
Mis bien amados, ¡oh! Cuanto me alegro de encontrarlos con el corazón abierto y receptivo. Abandonen vuestras sombras a eso que ellas son: las armaduras que les han servido para sobrevivir en este bajo mundo pero ahora yo vengo a aliviarles. YO SOY el consolador, YO SOY el hermano tan esperado sobre el camino.
No olvidéis nunca que la única cosa que desea la sombra es impedir que fluya vuestro corazón.
No olvidéis nunca que la sociedad dentro de la cual vosotros vivís tiene exactamente el mismo objetivo. No olvidéis nunca que las iglesias sólo tienen este objetivo en la cabeza, a pesar de la utilización de mi nombre y de mi historia. No olvidéis nunca que vosotros sois, por esencia, seres divinos, llenos de gracia, llenos de todos los atributos de la luz divina.
Paz a vosotros. Olviden vuestras querellas humanas, abrazaos con el corazón. La hora de la reconciliación ha llegado para todos aquellos que lo quieran verdaderamente.
Yo los amo. YO SOY Cristo. YO SOY la luz del mundo.
CRISTO – LA LUZ VIENE POR LAS BODAS
Traducción: Susana Milan - 19 julio 2007
Yo os bendigo mis niños e inundo vuestros corazones de mi gracia eterna. Mis bien amados, vengo hoy a hablaros de la luz, de hecho de las luces, porque no ya una luz sino luces. Igual que hay muchas estancias en los reinos de la creación, hay también muchas luces. Primero de todo, la luz que ilumina los planos de vida en la dimensión encarnada hasta los planos más alto. En efecto, los serafines ¿no han sido llamados seres de fuego? ¿Y el fuego no brilla como una luz intensa, también como una estrella o un sol?
La luz puede ser definida por sus características, por sus medidas físicas, por sus efectos sobre lo viviente, todo esto participa del análisis de esta luz. Y cuando os digo mis bien amados, que vosotros sois luz, que vosotros sois los hijos de la Fuente que es luz, no hay que confundir por tanto, todas estas luces, no tanto en sus descripciones o sus efectos -¿quién no lloraría ante el espectáculo de un ser viviente pulsando lo más cerca del trono de Dios?- sino más bien en cuanto a la finalidad de la luz. El objetivo de la luz va a definir el rol de ésta, más que sus atributos.
Y vuestra luz, ese esplendor de la creación que sois vosotros, ¿cuál es su finalidad? ¿Volver a la Fuente o alejarse de la Fuente? Según vuestra finalidad la vida de vuestra luz va a modificarse para conformarse a las necesidades de vuestra alma y, evidentemente, esta luz espiritual va a inducir manifestaciones en vuestra vida que serán diametralmente opuestas. Si pudieran ver vuestra luz notarían diferencias importantes.
El mejor calificativo que encontraréis en los reinos de la creación -desde los planos densos físicos hasta los planos de la creación de los mundos- está entonces en la finalidad. Pero el objetivo es siempre o bien, aproximarse a la Fuente, y en ese caso la luz es caliente, o bien, alejarse de la Fuente, y en este caso la luz es fría.
¿El frío y el calor tienen los mismos efectos en la vida? Ciertamente no. En un caso habrá expansión de la vida, en el otro caso contracción. Todas las luces pueden resolverse en esta última ecuación y además, en vuestra encarnación pueden orientar vuestra vida sea hacia mí, sea hacia el otro (Lucifer).
Pero no podréis vivir vuestra unidad de divinidad más que habiendo vivido los dos. Y es por eso que yo os decía en mi encarnación, que no juzguéis a vuestros hermanos porque no veis enteramente el destino del Padre para cada alma, no veis la finalidad de la luz. En todo caso, sólo podéis ver a través de vuestro propio filtro que colorea o decolora todo y la medida con la que vosotros juzguéis servirá para juzgaros porque sois todos iguales en luz, sois iguales en verdad, pero en diferentes momentos de vuestra evolución. Aquellos que están delante de vosotros, sois vosotros pero más tarde. En cuanto aquellos que están detrás de vosotros, sois vosotros más adelante.
Sólo la difracción de la luz os impide vivir la unidad en este mundo pero se os pide que no funcionéis más según los antiguos códigos de la dualidad. Mi mensaje de hace dos mil años fue y es: “amaos”. Yo he venido a enseñaros la unidad pero los hombres no tenían en ese momento, los medios de poner en práctica mis preceptos. Hoy ha llegado la hora de vivir en mí, de vivir con mi luz y no más con la de la división y la dualidad.
Ya no es tiempo, mis bien amados, de discernir, de separar. Yo vengo ahora a pediros un acto de amor inaudito: “amaos los unos a los otros, amad a vuestros enemigos porque sólo amando a los enemigos de mi luz, los venceréis inundándolos de mi gracia y de mi amor, dándoles de beber amor y verdad y capitularán ante vosotros y yo reunidos”.
Mis amigos, os pido la ofrenda total de la apertura de vuestro corazón, yo os demando vuestra maestría a través de vuestro soltar presa a la sombra, os pido estar en paz y haceros amor, os pido no volver a tirar piedras, como las piedras que llamáis discernimiento, o las piedras de vuestros miedos de abandonar vuestra realidad por mi realidad y la del Padre.
Vengo a deciros: «no tengáis miedo». Vengo a deciros que sois al fin, libres entonces levantad las cadenas de vuestros juicios, de vuestras separaciones, de vuestras divisiones. Vengo a deciros que améis a toda la creación porque vosotros detenéis en vosotros la fuerza de hacer volver las tinieblas a la luz. Vuestra luz puede y debe hacer llorar de amor al diablo y a Lucifer porque el amor puede sanar todo y sobre todo, su propia negación. El amor es todo lo que es, la luz es su más fiel manifestación aquí y más allá.
La luz viene por las bodas. ¿Aceptaréis uniros a ellas? ¿Aceptaréis unificaros con vosotros mismos?
Sí, lo haréis, porque vuestro destino es el de Dios, el de la alegría y el de la unidad. Nada podrá resistir esta llamada. Entonces abrid, abrid todas las compuertas de vuestros corazones, amad sin freno, sin juicio, sin discernimiento, sin división, sin dualidad. ¿Queréis seguirme fuera de la dualidad? ¿Queréis remontar hacia los reinos de la alegría y la felicidad eterna? Entonces, si vuestra respuesta es “sí”, aceptad no rechazar nada, aceptad amar todo, abrazad todo en el fuego de vuestro corazón, haced todo sagrado, en unidad y divinidad.
Mis niños, mis hermanos, mis amigos, mis bien amados, me inclino a vuestros pies para ordenaros abrir las compuertas de quienes sois y de lo que habéis olvidado, por necesidad de vuestras encarnaciones. Pero las encarnaciones tienen un fin.
Un ciclo se acaba y permite la apertura de vuestro código genético. Vuestra libertad os es devuelta ¿la queréis? ¡No me digáis, mis bien amados, que preferís permanecer en prisión, que preferís quedaros al margen de las bodas celestes!
Yo sé que cuando venga el gran día, el más grande de los enemigos de la luz se situará en las filas de aquellos que cantan las alabanzas de la creación de amor y de luz.
Yo os amo. Amad vosotros como yo os amo, sin barreras, sin filtros, sin sombras.
Paz a vosotros.
Jesús Cristo
CRISTO
Traducción: Odilia Rivera - 9 de julio 2007
Mis bien amados, yo vuelvo con amor para confirmarles que la vibración es amor, la vibración es luz, la vibración es verdad. Toda vibración que ustedes emiten con el corazón es capaz de transformar realmente el mundo si no mi sacrificio y mi crucifixión habrían sido en vano. ¿Qué pensar de aquellos vuestros hermanos que pretenden que la vibración no puede cambiar las cosas? ¿Aquellos que dicen que la vibración emitida por el corazón no es del tamaño para luchar contra la sombra y la fatalidad de vuestras vidas? Aquellos de vuestros hermanos que dicen eso han perdido la fe, la que desplaza las montañas.
La fe es el motor de la vibración de vuestro corazón, está bien que ella mueve las montañas, pero con la vibración del amor en ella, es mayor la fuerza que crea los universos. No creer en ella, considerar esta fuerza como cualquier otra fuerza, compararla con las otras fuerzas, es un acto de poca fe y de falta de amor. El que vive el amor pasa a ser el faro de toda vida, trasciende por radiación su entorno y también la calidad del sol y de todos los planetas.
Todo está interrelacionado, todo es interdependiente, nada puede existir sin la radiación del amor. Si ustedes dudan de eso ¿Cómo harán para venir a mí? ¿Cómo harán para cambiar de vibración? ¿Cómo podrán amar a sus hermanos? ¿Cómo, mismo, podrán amarse a sí mismos? No hay reglas aritméticas, no hay reglas aritméticas complejas, la sola regla es: El amor es todo eso que es. Ver otra cosa es ya una dualidad, ya una división y ya una denegación de vuestra divinidad y de vuestra unidad. Es entrar dentro de la acción y reacción. El amor es gracia, el amor es unidad, ¿porqué no casar este axioma? Todo se transforma a la luz del amor, todo se resuelve dentro de la unidad del amor.
Mis queridos hermanos, por supuesto ustedes son libres, libres de continuar todas sus experiencias. Mientras la sed de experiencia esté allí, no podréis hacer la última experiencia que es amor. El amor es la única experiencia que acaba todas las demás, la sola experiencia que puede conducir a vuestra divinidad. Todas las otras no son más que alejamientos. Comprendan bien que no juzgo y no juzgaré ninguna experiencia otra que la del amor ya que, en definitiva, todas estas experiencias les traerán un próximo día la experiencia última y el tiempo no cuenta, la suma de sus experiencias tampoco, ante la grandeza del amor.
Mi corazón tiene por todas partes sed de ustedes, sed de verles reencontrar a nuestro Padre. Mi corazón arde para abarcarles dentro de mi fuego. ¿Cuál logro más hermoso es que el de fundirse dentro de este brasero de amor que, yo y otros muy grandes seres de luz, les proponemos? ¿Cuál es la experiencia que puede rivalizar con el fuego del amor? Ninguna, por supuesto. Pero mientras no decidan vivirla, yo no puedo tenderles la mano completamente, sólo puedo acariciarles el alma, de un tiempo a otro, que me acuerdo, acerca del buen recuerdo de unidad que ustedes son.
Mis bien amados hermanos de luz, vengo a lo sumo cerca de ustedes, para tocarlos. ¿Aceptarán dejarse tocar por mi fuego? YO SOY vuestra defensa contra el sufrimiento, vuestra defensa contra la noche. ¡Oh! cuanto los amo, ¡oh! cuanto soy ustedes, que son mí, ¡oh! cuanto vuestra luz es necesaria para el sol. Ustedes cuentan más que nunca de lo que puedan creer o esperar.
Huyan de aquellos que quieren inducirlos dentro del dolor, dentro de la creencia de vuestra dualidad. Ciertamente están en peregrinaje desde tantas y tantas vidas que creen verdaderamente lo que viven como la realidad. Pero la única realidad es la unidad, el “YO SOY”, la vibración del amor. Remuevan sus vestiduras de miedos y de sombra. Revistan vuestras vestiduras de gloria, adórnenlas del color del amor y de la verdad.
Yo estoy allí para acogerles, abarcarles, felicitarles de haber hecho la elección de la verdad.
Jesús Cristo
CRISTO
Traducción: Odilia Rivera - 8 de Julio de 2007
Mis Bien amados, aquí mi paz. Vengo hoy para nutrirlos de la luz. En efecto ¿Qué es la luz? ¿De cuál luz hablan cuando buscan la luz? ¿Es la del día? ¿Es la del sol o también la que capta su pantalla interior cuando meditan? La luz espiritual es otra, no pertenece a esta dimensión donde ustedes viven, ella pertenece al reino de los Cielos. Ella es, dentro de su mundo de tercera dimensión, la argamasa invisible de toda vida. Sin ella ninguna expresión de vida encarnada es posible.
Ella brilla como la luz de un templo, ocultada a las miradas exteriores, ocultada y velada para que no se convierta en el objetivo de la propia búsqueda. Ella es también vibración (pero no vibración de ondas o de corpúsculos como lo dicen vuestros físicos), ella es vibración de amor, un imán que atrae e irradia al mismo tiempo. Ella es el medio de su regreso a la unidad. Numerosos místicos la han visto y no regresaron indemnes. Numerosos seres humanos hoy la han visto y se han transformado mas allá de todo lo que era concebible.
Esta luz es capaz de modificar totalmente un universo. Cuando ella está manifestada y develada, es por tanto omnipresente pero solo el hecho de revelarla la vuelve eficiente. Para ustedes, mis bien amados, la única manera de revelarla es utilizar la dulzura de vuestra consciencia, el amor de su alma, a fin de que ella pueda nacer en su templo interior, en su corazón. Y ¿quién puede mejor que yo, encender su lámpara, yo que soy “la luz del mundo”?
Mi fuego es el soplo que puede abrir las válvulas de la luz en ustedes. Para eso es necesario aceptar que “YO SOY ” les inunde de su gracia. Es necesario asimilar y vivir el amor ya que el amor es luz. Mientras que su amor no genera luz, este amor viene de sus apegos solamente cuando su amor esté en verdad entonces se bañarán dentro de la luz que es vibración.
La luz de quien vibra el amor es otra que la luz de vuestros días. No olviden jamás que existir en su mundo significa, realmente, tenerse fuera de la verdad de la vida. Y, ¡oh! Cuánto, en estos días, es esencial hacer venir, hacer penetrar la luz dentro de la sombra de esta vida humana ya que ella sola puede transmutar, comulgar con los miedos y las dualidades de la vida.
¿Están ustedes solos para realizar eso? No. Ciertamente están solos para hacer la elección de la sombra o de la luz pero, una vez hecha la elección, entonces mis seres de fuego vienen a encender la llama de su templo. No están nunca solos cuando su alma ha decidido unirse a la verdad. Y aquí que en estos días bendecidos que están allí, la luz está propuesta al conjunto de vidas. A Gaia, en su globalidad, se le propone un estallido de verdadera luz.
¿Qué elección harán mis bien-amados? Son, ¡oh! Cuanto, más hoy que antes, libres de vuestras elecciones. Pero cuánto deseo tengo de decirles “vengan a mí”. Cuánto todos los seres que los rodean desean ardientemente traerles a casa, traerles dentro de vuestra luz a fin de ver brillar aquello que son, de ver todas vuestras luces nacer de nuevo en sus consciencias. Este espectáculo es el más bello que el Padre pudiera ofrecer a sus creaturas: este momento sublime de la revelación, instante donde, a la vez, el amor, la luz, la verdad están presentes en ustedes como en la alborada de toda creación. Qué gracia en ese momento. Que magnificencia de la que me regocijo.
Mis bien amados, YO SOY vuestro pastor, YO SOY el guardián de sus días y sus noches. Me gustaría tanto que, juntos celebráramos la ascensión de Gaia, juntos, nosotros cantamos el canto de vida, el canto de vuestro regreso en unidad. Es el final del miedo, de la dualidad, de las experiencias para los que lo quieran, para los que lo esperan, para los que están listos.
Pero ¿quién está listo? Todos y todas, por supuesto. No es ya tiempo de creer en sus errores pasados y en sus efectos nefastos sobre ustedes. No es ya tiempo de creer que el miedo puede aún impedir vivir a su luz. Les aseguro que, si ustedes vuelven sus ojos hacia mí, mas nada exterior podrá impedirles vivir en la luz. Solos los espíritus contrarios a la luz quieren hacerles creer que están aún encadenados a sus esquemas expirados. Solo los apegos de la sociedad quieren encerrarlos dentro de los modelos sociales pasados. Como aquí hace dos mil años, quiero decirles: “Vengan a mí, dejad a los muertos enterrar los muertos”. ¿Lo harán? ¿Responderán a mi llamado? ¿Oirán mi voz? ¿Verán mi luz? ¿Me abrirán las puertas de su corazón? o ¿seguirán siendo sordos a todo eso, encerrados en sus miedos y en sus sufrimientos?
No puedo ir en contra de su elección pero me atrevo a abrir los ojos y el corazón. YO SOY su amigo, nadie más les conoce tan íntimamente y personalmente. Nadie más que yo les quiere tan bien, excepto ustedes mismos cuando aceptan ya no verse como seres limitados, incompletos, o en sufrimiento.
Mis bien amados, les doy mi paz, les doy la luz, les doy mi bendición.
Jesús Cristo
CRISTO
Traducción: Susana Milan - 7 julio 2007
Mis bien amados, vengo a vosotros para hablaros de la paz. Frecuentemente, durante mi vida, yo decía a aquellos a los que me aproximaba: “os doy mi paz”. Ahora, esta paz que yo daba sin restricción es la paz del alma, esa que apaga la sed, ligada a la noche de la encarnación. Nadie puede transmitirla excepto yo, es la reconexión, es el amor y verdad, viene a abrazar el alma con un fuego que llena, un fuego que no quema pero que hará que nunca más el alma tocada tenga sed, no conocerá más la noche, vivirá por y para la luz. Es esta paz que hoy vengo a daros, con mis ángeles, con María y Miguel, con las milicias celestes y vuestros hermanos de la intra-tierra.
Comprended que nada puede en este mundo, aportaros la paz. Ninguna satisfacción, ninguna oración, ninguna meditación, ningún despertar puede rivalizar con esta paz. Es la que han conocido mis santos, otros santos cuya vida es esta paz destacada. Cuanto os toque en vuestro momento, nada podrá ocurriros, nada podrá permanecer en la sombra. Ella es la garantía de vuestra resurrección ascensional que vendrá. Se tratará de un estado de ser perfecto o, permanentemente, estaréis en amor, por vosotros, por mí, por toda la creación y ciertamente sobre todo por el Padre.
Vuestra paz será el motor de vuestra ascensión. Ella guiará vuestros pasos, como la verdad de la que os he hablado. Será un estado de radiación permanente de vuestra unidad y de vuestra divinidad. En esta vibración seréis luz, seréis yo, yo seré vosotros. Vosotros arderéis de amor, os consumiréis sin quemaros, experimentaréis en vuestro ser de carne el efecto de la luz y de la unidad en vuestras células, y sobre todo en vuestro corazón. Vosotros abriréis entonces, las compuertas de vuestro ser real, vuestra mente no podrá interponerse más, vuestras emociones tampoco, por cierto. Sólo quedará la emoción última que conduce a vuestra esencia.
Seréis como los niños que descubren una cosa increíble que su esperanza más loca no puede concebir. Sentiréis la vida correr en vosotros, seréis la fuente y el agua que brota a la que vuestros hermanos podrán venir a beber. Podréis entonces, con vuestra sola presencia en paz, contagiar de uno en uno a aquellos de vuestros hermanos que penan por dejar derramar la sed de mí. Nada más auténtico puede ocurriros. Por eso la palabra maestra es confianza: confianza en vosotros, confianza en la vida, confianza sobre todo en nosotros y nuestro Padre común.
La gracia es un momento sublime en la vida de un alma, es el retorno a la casa, es el fin de la división, el fin de los sufrimientos, el fin de las preguntas, el fin de las luchas, la apertura a la verdadera dimensión de luz. Como cuando algunos de vosotros han dejado su cuerpo para encontrar la luz, exceptuado que en el caso presente, estaréis en vuestro cuerpo y éste se iluminará desde el interior, su luz será visible, su efecto será evidente.
Viviendo esta paz que os prometo, llegaréis a vivir en unidad. Estaréis en comunión conmigo y todos aquellos que viven en los reinos de la luz. Viviendo esta paz que yo os daré, os estremeceréis, vuestra piel emitirá perfumes desconocidos para vosotros, vuestro amor englobará del universo, al átomo. Podréis ser lavados de todo lo que no es vosotros en luz, todo lo que no es vosotros en unidad. Vuestro camino está aquí, ahora, os lleva a vosotros si lo deseáis desde el fondo de vuestra alma.
¿Cómo acoger esta paz, me preguntaréis? Simplemente siendo simple, siendo abierto y diciendo “sí” a mi presencia en vosotros, “sí” a la luz, “sí” al fin de las experiencias de la ilusión de la dualidad. Aceptando no dirigir más una mirada de dualidad, aceptando cesar vuestras luchas y vuestros combates, incluso aquellos para la luz.
Comprended y aceptad mis palabras. Vengo en Majestad a liberaros de vuestras cadenas, a liberaros de vuestras ataduras, a abriros los ojos, a marcaros mi sello en el corazón, si esa es realmente vuestra aspiración y si me dais vuestro asentimiento.
Mis bien amados, YO SOY Cristo, rey de amor y yo dije que volvería, armado de una espada de justicia y verdad. Mi brazo armado no está en camino hacia vosotros para dividir o juzgar sino para acoger a todos aquellos que querrán mi paz. Estad preparados, pemaneced unidos, permaneced en esperanza. Yo os amo, yo os bendigo. Mi primera efusión de paz vendrá ahora en menos de dos semanas de vuestro tiempo terrestre, no os quedéis sorprendidos por las fechas, porque “nadie conoce la fecha, ni la hora” era exacto cuando los tiempos no estaban cumplidos. Ahora se han cumplido y nosotros podemos, desde nuestros planos de luz, contar en vuestro tiempo terrestre, el tiempo que nos y os separa de esos instantes de reencuentros.
Paz. Paz. Paz.
Jesús Cristo
CRISTO
Traducción: Odilia Rivera - 6 de julio 2007 (2/2)
Todo es vibración: la mirada que pones, las palabras que emites, las caricias que prodigas, la dedicación de tus dones. Tu ser entero es vibración. La vibración no puede más que morir o crecer, no hay lugar para el reposo, no hay lugar para el lugar, todo es movimiento dentro de la vibración. Los universos son vibración y la luz de todas las dimensiones es vibración.
Todo tu ser es vibración, que viene de la Fuente y regresa hacia la Fuente. Solamente el tiempo que pones en alcanzar el punto de encuentro entre el alejamiento y el retorno es importante ya que ese punto crucial es el lugar de tu reversión de la sombra a la luz. Así es tu camino de vibración. Tu regreso hacia la Fuente es únicamente función de este instante mágico, el momento donde tu alma sedienta de luz va a decidir de volver de nuevo hacia su Fuente que es ella misma.
En ese instante todo se duplica y se subdivide, se expande ante tu consciencia en movimiento. Este momento tan esperado, deseado, buscado y a veces rehuido, se nombra Amor. El amor es el lugar de todas las reversiones, el lugar donde la vibración adoptará su retracción para reentrar dentro de la expansión. Esta dilatación es el reencuentro con la luz. Mientras tu camino de retorno comienza. El ojo que pongas sobre este camino puede hacerte creer que está pavimentado de rosas o de espinas, está corto o largo pero solamente la mirada que tú allí pongas, solo tu capacidad a aceptar totalmente tu esencia que es Amor va a orientar el sentido de tu expansión.
¿Serás un ángel? ¿Una estrella? ¿Una deidad? Todo es posible, todo es concebible. Solo la calidad de tu radiación entra en cuenta. Si tu alma permite, si tu espíritu desfallece, entonces reentrarás dentro de tu matriz, en tu ascensión, te incorporarás a la Fuente, la fuente de cristal, te fundirás en tu realidad esencial, te volverás la vibración, esa donde nacen y mueren los mundos y los universos, esa donde el amor y la luz se conjugan por todos los tiempos en todo tiempo. Entonces, peregrino de eternidad, tu reentrarás por fin dentro de la vía, esa que es una, que no puede más que expandirse, que no puede ser más que donación, soplo y palabra del eterno infinito.
Dentro de esta nueva vibración, tu totalidad celebrará esponsales con la eternidad, tu infinito celebrará esponsales con el indefinido, millares de ángeles cantarán tu retorno, cada uno de los átomos de tu ser franqueará el límite cuántico de la dualidad. Tú reirás de ser por fin reconocido, tú reirás del camino recorrido, tú reirás de tus hermanos, no de burla, pero una sonrisa que no juzga, una sonrisa que ama. En ese momento, serás deidad, serás la luna, el sol. Tu vibración alcanzará el corazón de los universos, estarás a la vez por todas partes y en todo tiempo al mismo tiempo.
En la alborada de los días, estaba a tu lado. En la noche de tus vidas estaba contigo, sosteniéndote en mi vibración. Hoy te vuelves tú, y por lo tanto yo, ya que te dejo el lugar.
Yo te amo y te bendigo.
Jesús Cristo
CRISTO
Traducción: Susana Milan - 6 julio 2007 (1/2)
Poner el instante fuera de tiempo, para tocar la inmensidad. Parar la marcha para encontrar la esencia del paso. He aquí la llave que permite encontrar la unidad: en vuestro estado dual de belleza visible, por la exteriorización fuera de vosotros mismos. Ésta no podría verse si fuera esencia. La experiencia de la vida encarnada es un medio sublime de desmultiplicar la unidad, poco a poco los descensos en vibraciones de encarnación, terminan por perder la naturaleza esencial de la unidad.
Así llega el momento en que suena la hora de volver a casa. Así va la rueda de las encarnaciones: experiencias, flujo y reflujo de las emociones, pasiones, deseos. Nada de criticable o loable, simple juego de vida, juego de amor. Pero, al jugar, vosotros olvidáis el objetivo que es la experiencia y os convertís entonces, en peones. Para aquellos que desean jugarse a los otros, la desmultiplicación de las unidades conduce también a la división y a la sustracción. Pero viene siempre un momento en que la partida se acaba, para aquellos que deciden desvelar y desvelarse para reencontrar su esencia, retornar a su fuente, desvincularse del Yo para entrar en el Uno.
Mis queridos amigos de unidad, YO SOY la luz del mundo, como lo sois vosotros también. Llegáis a una encrucijada de vuestros juegos y de vuestras experiencias. Yo os pido que elijáis vuestra realidad, vuestras condiciones. Todo está preparado para volver al centro o para alejarse todavía más de vuestra esencialidad. Os corresponde situar el reloj de arena algunos instantes para mirar: ¿Quiénes sois vosotros? ¿Qué queréis? ¿Qué desea vuestro corazón? Es el gran momento de hacer y plantear vuestras elecciones.
Sois, mis queridos hermanos en unidad, enteramente libres. Absolutamente nadie os juzgará, absolutamente nadie os condenará, sólo los pequeños jefes del “yo” os lo han hecho creer. Dios es amor, vosotros sois amor desde la eternidad. El Karma es una ley, yo he reemplazado esta ley de acción /reacción por la ley de gracia.
Mi sacrificio es la realeza de vuestras vidas. ¿Aceptaréis vosotros el regalo de mi don? Si lo aceptáis, sed bienvenidos, sed bendecidos. Si rehusáis, sed bendecidos también. Vuestra llama de vida no puede ser destruida, solamente puede dar ilusión en el juego de los otros. Nada de lo que ha sido creado o de lo que se crea puede perderse, todo se transforma, todo evoluciona de vida en vida, de vibración en vibración. Un sol que muere a una manifestación se desplaza a otra manifestación invisible a la primera. Así transcurren vuestras vidas, vuestros alientos, vuestras esperanzas.
Sólo permanece inmutable la fuente de la que vosotros venís, la fuente a la que volvéis. Vuestra encarnación es una excarnación de la Fuente. Ésta permanece por lo tanto en la esperanza de vuestra respiración eterna y de vuestro retorno, ella extrae en su pulsación y su radiación el recuerdo de vosotros, la esperanza de vosotros.
Queridas almas amadas, vosotros sois la sal del mundo, sois la sonrisa de Dios, sois los peregrinos de la eternidad. Como unidades indisociables de la unidad no podéis batiros, no podéis confrontar o enfrentar. ¿Cómo podría el único enfrentarse al único? Yo os planteo la pregunta. Jugar el juego de la oposición, de la contradicción es una fantasía de la mente, una fantasía del sueño de la división.
Vosotros sois preciosos, en vosotros cae la semilla de Dios, el alma del mundo y de las creaciones.
Yo os amo y os bendigo.
Jesús Cristo
CRISTO
Traducción: Odilia Rivera - 5 de Julio de 2007
Bien amados hermanos en encarnación, mi llegada en gloria está próxima a su orbe. “YO SOY” vengo a despertar su luz. Vengo con mis ángeles para abrir las puertas de su alma, mis ángeles del señor velan en adelante por ustedes.
Están a pasar a ser, Están en expansión, Están despertados, esta luz vibración viene a percutir y conectar a sus campos vibratorios de tercera dimensión. Viene conectar y fusionar su ser etérico con la luz central. Esta luz azul que algunos perciben y viven como un gran fuego es la vibración del Sol Central, esta vibración activa desde hace 23 años llega por fin a madurez y totalidad, ella puede por fin abrir las últimas puertas que bloqueaban la entrada a su templo interior.
Mis bien amados, esta vibración transportada, llevada en majestad por María y Miguel, fue llamada en mi tiempo el “manto de compasión”. Ella es la vibración que prefigura el paso de la antorcha de Miguel a Uriel, la vibración que provoca la inversión, el encendido de vuestro vehículo ascensional, y sobre todo el fin de las ilusiones, el fin de las decepciones.
Almas benditas velen y rueguen, manténganse listos, dejad caer los juegos de la ilusión, los juegos externos a ustedes mismos, los juegos estériles que los alejan de su realidad. Su realidad es unidad, su realidad es amor, su realidad es vibración y ligereza. El tiempo de los ensayos está verdaderamente terminado para dejar paso a la prueba. ¿Me aman? ¿Aman a nuestro Padre? ¿Nos aman lo suficiente para que regresar hacia nosotros?
No hay más tiempo de mirar detrás de ustedes, no hay más tiempo de recorrer el tiempo, de supervisar y reaccionar a lo que ocurre en el exterior de usted. Es la hora de saldar sus cuentas, sean deudoras o por pagar, ya que puede cambiar muy próximamente de tipo de cuentas. Sus nuevas cuentas serán infinitos ya regulados por el don y la ofrenda y no más sujetos a las reacciones interminables de vuestras acciones ya que no habrá más espacio para la reacción.
Sólo persistirá la acción de gracia que es rezo y comunión permanente a la Fuente. La luz será muy diferente de la pálida copia que observan desde la superficie de su planeta. Deben aceptar que el lugar donde viven durante tanto tiempo no es más que el reverso de la verdadera vida donde la sombra rivaliza a la luz dado que, en la vida en el lugar, sólo existe la luz que reina sin división alguna.
Sus sueños más inauditos no son más que un pálido reflejo de la verdad, ciertas de vuestras experiencias, las más vibrantes y las más fuertes no son más que la sombra de la verdad. Mis muy queridas almas, están a la puerta de un gran día, este gran día en que verán las barreras entre todos ustedes hermanos caer, entre todos los reinos desvanecerse. Como ha sido dicho “el león comerá junto a la oveja”.
Aquí, mis hermanos en humanidad, lo que quería decirles y que vibraran.
Son bendecidos doy las gracias por vuestra escucha.
Jesús Cristo
CRISTO
Traducción: Susana Milan - 24 mayo 2007
Yo os saludo y yo os bendigo, queridos hijos, queridos hermanos en Humanidad. Vengo a vosotros para tranquilizaros, para bendecir vuestra Divinidad, vuestra Unidad y vuestro camino de Verdad, en este espacio sagrado de vuestra Tierra, en vuestro espacio sagrado que es ese momento tan esperado en vuestro planeta. Amados hermanos, amados hijos, os saludo, yo que he llevado esta Tierra hace dos mil años, yo que he sacrificado mi encarnación para permitir a este planeta ascender hacia su sacralidad. Vengo a vosotros hoy en este instante bendito, en este instante que precede un poco, a un periodo importante de este planeta. En efecto, dentro de unos días vais a vivir y experimentar la totalidad del descenso del Espíritu, en vuestros cuerpos, en vuestros espíritus, en vuestras almas, para preparar un fenómeno descrito por muchos médiums, muchos inspirados en este planeta, hace ahora más de veinte años. Este proceso que muchos han llamado ascensión es un proceso que se pone en acción este año tan particular.
Os corresponde hoy más que nunca, encontrar vuestra Unidad, encontrar vuestra Unidad fundamental para permitir a vuestro ser, en su totalidad, preparar el fenómeno ascensional que viviréis durante este periodo bendecido y tan querido de la Navidad de este año. En efecto el Padre, en su gran mansedumbre, va a volver a colocar de su mano, de su Aliento, de su Espíritu, las posiciones de los planetas alrededor del sol. Vais a vivir momentos inéditos, vais a vivir momentos de gran poder en el corazón, momentos de reencuentros, debería decir que van a permitiros reintegrar vuestra Unidad primera, reintegrar vuestra conexión a la Fuente, vuestra conexión al Padre y vuestra reconexión, evidentemente a mí mismo. Queridos niños, una gran difusión, una gran audiencia deberá hacerse para estas palabras que os anuncio en este día que precede ese día de Pentecostés.
Os corresponde irradiar. Os incumbe, hoy más que nunca, hacer el esfuerzo de encontrar vuestra Divinidad para permitir a la totalidad de vuestro ser escapar a los condicionamientos que, lo son desde hace ahora, miles y miles de años. Os concierne despojaros de todo lo que es un obstáculo a vuestra Divinidad, de todo lo que es resistencia al retorno de la Unidad. No veáis en los acontecimientos exteriores, cualquiera que sea la duración de estos acontecimientos, algo que es duro, en vuestro interior. Cuantas menos resistencias haya, más fácil será el camino, más fácil será pasar por el ojo de la aguja si os despojáis de lo que no es vosotros, si os despojáis de lo que es un obstáculo a vuestra Divinidad. No os corresponde sufrir más, no os concierne resistiros más a la Divinidad. A través de vuestro ego, a través de vuestra personalidad, habéis construido a lo largo de vuestras vidas, ciertos obstáculos a la Divinidad. En alguna parte en vuestra esencia, queda en un rincón, la promesa de retorno a la Unidad. El día del retorno a la Unidad se aproxima a grandes pasos ahora, estad seguros.
Me corresponde en este día bendito, anunciaros el retorno a la Unidad, me concierne en este día bendito, confortaros en vuestra Divinidad, confortaros en vuestra esencialidad. Es innegable que el esfuerzo a hacer es no resistir, que el esfuerzo a hacer es acoger con los brazos abiertos a la Divinidad que viene hacia vosotros, festejar esto como los reencuentros, como un hijo que reencontrara a su padre después de haber experimentado ciertas cosas, muy lejos del hogar. La hora de volver al hogar ha llegado ahora. En estos tiempos reducidos que os quedan ahora por cumplir se os pide insistentemente recorrer con ligereza el camino en el interior de vuestro ser, cualquiera que sea la dureza de vuestro exterior. En efecto, la Tierra en este periodo de sacralización, sustenta a humanos que rechazan la mayoría, desgraciadamente, esta sacralización. Os concierne iluminar a vuestros hermanos en humanidad. Os concierne irradiar este amor que os habita, irradiar la Divinidad que va a ser vuestra en los próximos días, para que un máximo de vuestros hermanos y hermanas pueda acceder a esta dimensión nueva que estará aquí, no lo dudéis más, hacia el fin de este año. Queridos hermanos y hermanas en humanidad, YO SOY con vosotros desde toda la eternidad, YO SOY en vuestro corazón, YO SOY en vuestras células, YO SOY en vuestro Espíritu porque ese es mi destino y ese es también, el vuestro.
En estos días benditos, os corresponde despojaros de todo lo que no es vosotros, de vuestra ilusión de vuestra personalidad, despojaros también de las enfermedades que os sobrecargan, que os impiden acceder a la luminiscencia total del ser que sois. La enfermedad ya no tiene recorrido, la enfermedad no existe ya para aquellos que miran al Padre directo a los ojos. Aquellos que reciben mi presencia en su ser no pueden ya presentar esta ilusión de la sombra y de la enfermedad. Hoy os conviene aligerar vuestros sufrimientos aligerando vuestra personalidad. Os corresponde hoy encontrar el camino de la Unidad y dejar infundir en vosotros la Luz del espíritu, esa que os permitirá, estad seguros, ser uno a uno llamados al seno de la Luz y acompañar esa maravillosa nave que es vuestra Tierra, que es nuestra Tierra, hacia un porvenir glorioso, hacia un futuro radiante donde la sombra ya no es, donde la división no es, donde todo está en alegría, donde todo no es más que belleza, donde todo no es sino transparencia e impermanencia.
Queridos niños, yo os hago la promesa que en estos tiempos benditos, la hora de la liberación del sufrimiento ha sonado al fin. Ésta se evidencia a grandes pasos a condición de que vosotros no hagáis nada por retenerla, a condición de que vosotros abráis totalmente vuestro corazón y vuestro Espíritu a la totalidad de la Divinidad que sois vosotros. Conviene por eso, abandonar los juegos estériles de la división, de echar la mirada de oprobio de unos sobre los otros, de echar la mirada hacia otros sin amor, que han sido vuestros juegos en la experiencia de vida de tercera dimensión y que conviene hoy, superarlos totalmente, a la Luz de la Divinidad, a la Luz de la Unidad. Es muy importante hoy, que vosotros difundáis estas palabras, mis niños. La Luz se revela en este fin de año. La Luz total ya no permite que la sombra venga a mancillar vuestros cuerpos, ni venga a mancillar la Tierra. Un mundo de Luz sin fin se os ha prometido, un mundo de Luz sin división os es por fin accesible. Os corresponde irradiar esta promesa que os hago en este día, transmitirlo a todo ser al que os aproximéis, mediante el silencio, la mirada, la palabra, mediante el contacto o por el pensamiento, esta energía de la Divinidad que viene, esta energía en la perennidad, esta energía de la Divinidad que es Luz eterna, Luz creadora, Luz que vosotros llamáis de quinta dimensión.
Esta quinta dimensión tan esperada para algunos, tan temida por otros, viene hacia vosotros en un plazo de tiempo que nadie puede transgredir, que nadie puede eclipsar, que nadie puede desplazar. Así lo ha decidido el Padre para el bienestar de su humanidad, para el bienestar de la vida, para el bienestar de la Luz, para el bienestar de la Divinidad y el acceso de todos estos parámetros a otra dimensión, a una dimensión elevada donde la sombra, yo lo repito, no tiene espacio. Queridos niños, como decía durante mi vida, id a anunciar la buena nueva: la sacralización del planeta, la ascensión dimensional del planeta y de los seres que lo quieren está de camino en una fecha que no puede ser cambiada, en una fecha que es fija porque esa es la voluntad del Padre. Os corresponde de ahora en adelante, en los tiempos que os separan de esta ascensión, despojaros lo repito una vez más, de todo lo que no sois vosotros: de vuestras sombras, vuestras enfermedades, vuestras ataduras. Os conviene encontraros a vosotros mismos, frente a vosotros mismos, frente a la Luz que sois. Vosotros sois Luz desde toda la eternidad y vais a despertar en vosotros esta Luz que la experiencia de la encarnación ha alejado de vosotros. Queridos niños, anunciad la palabra y sobre todo irradiad, irradiad esto en torno a vosotros.
Paz a vosotros, queridos niños, sed Luz, sed Unidad. Yo os transmito mi paz. Sed los embajadores de mi paz. Sed los embajadores de mi amor, sed paz, si lo queréis. En lo que concierne a este proceso que os he anunciado en este día bendito, deseo ir más adelante si vuestras preguntas se refieren a este proceso.
Pregunta: ¿podría hablarnos de los reagrupamientos, de las reuniones y del periodo de 3 días?
Los periodos de reagrupamiento vendrán después de este periodo ascensional, después de ese gran cambio. Los tres días corresponden probablemente a este periodo ascensional de cambio de lugar planetario. Esto sobreviene. Tendréis las más amplias informaciones, como se ha dicho en muchas ocasiones, por muchas entidades de Luz sobre este planeta. Mi madre se dirigirá a vosotros, a cada uno de vosotros personalmente para deciros: “estad preparados, la hora del Señor está aquí”. Seréis avisados individualmente, personalmente y colectivamente por mi madre setenta y dos horas antes del periodo.
Pregunta: ¿qué convendrá hacer durante estos tres días?
Esto será desarrollado en ese momento. Lo más importante es no proyectaros en esos tres días, no proyectaros en ese balanceo importante sino preparar este acontecimiento igual que se prepara un aniversario, una fecha importante, mucho tiempo antes, haciendo de forma que la fiesta sea perfecta. Para esto conviene hacer la limpieza en el interior de vosotros, mirar lo que no ha sido resuelto. ¿Cuáles son las ataduras que animan todavía vuestra alma? Y encontrar los medios, a través de la certeza de la Luz, a través de la certeza de mi amor y del Padre, de vuestra Divinidad. A medida que acojáis vuestra Divinidad, y solamente esto, el trabajo de las últimas resistencias quedará hecho.
Pregunta: ¿seremos ayudados por nuestros hermanos de la intra y extra Tierra?
Evidentemente. Van a ocurrir muchos acontecimientos. Os han anunciado la presencia de vuestros hermanos del espacio y de la intra Tierra. Esta revelación se va a hacer de manera brutal durante el verano. Muchos de los fenómenos serán vistos, oídos y claramente identificados.
Pregunta: ¿La oración es esencial?
Para aquellos que creen en la oración, la oración del corazón es esencial. Pero cuando hablo de alineamiento y de mirar al interior es y un acto de oración, evidentemente. Si tenéis necesidad de ponerle nombres para mirar hacia el interior, a vuestra Esencia, hacia la interioridad, entonces emplead las palabras, sean las que sean, cualquiera que sea la lengua. Lo importante es el proceso de la consciencia que se vuelve hacia la interioridad, hacia las modificaciones que están a punto de ascender hacia vuestros seres, hacia esa subida vibratoria de vuestras células, de vuestros átomos. Sólo esto debe estar en el primer plano de vuestra evolución.
Pregunta: ¿algunos han ascendido ya?
El fenómeno ascensional, querida alma, es un proceso al que nadie de vosotros puede acercarse. Se trata de lo que se podría llamar, de alguna forma, una “pequeña muerte”, como el proceso que precede al fenómeno que llamáis “salida fuera del cuerpo” donde todas las referencias se confunden, donde el exterior no existe más, donde una poderosa sensación de aspiración se produce y donde alguna cosa sale de algo, comparable, efectivamente al proceso de ascensión pero acompañado no de miedo sino de una gran alegría, de un gran estallido de la Luz, de un gran resplandor. Esto no corresponde a los procesos que vosotros habéis podido experimentar hasta ahora. Es un proceso muy nuevo, que atañe para la mayoría de seres humanos encarnados, a un proceso que no han vivido nunca. Yo preciso que este proceso es perfectamente natural a partir del momento en que vosotros habéis limpiado vuestro interior. A partir del momento en que no hay más resistencias, a partir del momento en que está la certeza de vuestra Divinidad, de vuestra Unidad fundamental, no puede haber miedo. No puede haber más que apertura, aceptación y ascensión.
Pregunta: ¿podéis ayudarnos a superar estos miedos y estas ataduras?
El trabajo que debe hacerse es un trabajo personal interior. Evidentemente seréis ayudados por la elevación vibratoria que está aquí desde ahora. Evidentemente se os ha otorgado el tener esa mirada interior con muchas facilidades. Esta es una ayuda constante proporcionada por los hermanos y hermanas de la intra Tierra pero también de la extra Tierra. Es importante dejar que la vibración os invada. Esta debe hacerse vosotros. Vosotros debéis haceros esta vibración, esta Unidad porque es la vibración de la Fuente que penetra en vosotros de ahora en adelante. No hay trabajo en el sentido intelectual. He dicho que se trataba de dejar caer las resistencias. Se trataba de crecer en Luz, de crecer en vibraciones, de crecer en irradiaciones. Todo lo que deis a vuestros hermanos y hermanas os será devuelto centuplicado tal como yo os había anunciado ya. Irradiad, dad este amor, esta Luz y esta vibración y vuestro interior se iluminará. Vosotros no tenéis ninguna necesidad de arrojaros sobre vuestros miedos. No tenéis ninguna necesidad de desmenuzar intelectualmente cuales son las resistencias que hay en vosotros. Estas resistencias se revelarán ante vuestro trabajo de Luz. Entonces, irradiad, aportad vuestra bendición por la palabra, por el silencio, el gesto por la oración, por la presencia simplemente. Contentaros con emitir esa vibración cada vez más y vuestro interior se iluminará.
Queridos hermanos y hermanas en humanidad, voy ahora a dejaros y os pido encarecidamente que paséis mi vibración a cualquier ser, por todos los medios puestos a vuestra disposición. Yo os aporto mi bendición. Sed bendecidos. Os amo y estoy con vosotros.
Jesús Cristo
CRISTO
Traducción: Odilia Rivera - 20 de Enero 2007
Mi niño la hora está próxima a las revoluciones eternas, las que llenan el alma de la certeza y de la demostración de la unidad de lo creado. Te corresponde poner un final a los errores de este mundo eligiendo el mundo nuevo. Esta dimensión de experiencia se muere, solo quedan los frenos que le permiten subsistir mas allá de eso que era requerido por el creador. En estos días, muchos movimientos vienen a precipitar las convulsiones del parto. Este parto del hombre al ángel se refiere a muy pocos posibles sin embargo incluso los que se rehúsan o no puedan acceder a este nuevo estado experimentan los tormentos de este parto, ya que la tierra lo vive, el fenómeno es por lo tanto colectivo, y no individual, mismo si concierne solamente a aquellos individuos predestinados o estructurados para eso en esta vida última de la tercera dimensión.
Corresponde hacer nacer y dejar vivir solamente eso que debe perdurar en esta quinta dimensión. No es necesario hacer perdurar un sistema ya moribundo, al contrario, dejarle apagarse, descolorarse, dislocarse dentro de sus propias contradicciones. As tu olvidado mis palabras:”mi reino no es de este mundo”, mi reino es el de la Luz, sin forma e increada que sin embargo abreva este reino terrestre descarriado.
Numerosas almas esperan recrear un paraíso que no puede existir sobre esta tierra en estas condiciones. Las nuevas normas de vida serán ellas del espíritu y no de la materia. El que se preocupe de nutrir su materia no verá el espíritu nacer en el, los que se preocupen de esta materia no verán la sacralización de la nueva materia sino volverán a sembrar una nueva forma de tercera dimensión ya que tal es su camino. La transformación de esta tierra implica las elecciones personales y todas respetables, solo pocas almas irán hacia el ángel, hacia la dimensión prometida, pero eso no es digno de ser juzgado ni debatido ya que la elección de las almas es libre.
Sólo la visión idealista de la multitud en camino espera que su voluntad sea hecha independientemente de la voluntad de la Luz. Esto ya es acto de rebelión y de voluntad de ir en un espacio que no es el de las dimensiones elevadas pero, mis hijos, la libertad permanece y permanecerá siendo el regalo hecho por el creador... Nadie puede imponer cualquier cosa a cualquiera, nadie puede querer para el que no quiere. La más grande lección de humildad es esta: “deja a los muertos enterrar los muertos y sígueme”.
YO SOY la guía infalible hacia más alteridad, hacia más autonomía y libertad, mi campo es el de la gracia y no el de las limitaciones inherentes a sus condiciones de vida dentro del mundo de la caída. Esta experiencia es la decidida por vuestros fuertes contratos antiguos pero, ahora, el contrato está cumplido. La mayoría está libre de rehacer el camino o de recrear los términos de un nuevo contrato, les propongo el final del contrato y el retorno a la unidad, la vuelta a los campos de experiencias de pura Luz, los dudosos retrocederán ante esto desconocido que es con todo su patria.
Solo los que gustan de la verdad podrán seguir mi vía. Ahora bien esta vía es libertad y no compromiso. Desgracias a los profetas de la fatalidad que predicen los días felices sobre esta tierra. El reino no está aquí mismo, si es cierto que se les ha sido asignado como tarea subir esta Tierra hacia su sacralidad, la misión pasa por el abandono de la crisálida que es el manto de este planeta. Amigos y hermanos en la Luz, preparen sus templos interiores, prepárenlos en espíritu y en verdad, ya que deben estar libres de todo lo antiguo, corrupto. Sus templos deben estar vacíos de ídolos que han imaginado, deben esta como los cristales transparentes a fin de que ningún obstáculo o vínculo los solidifique dentro de un pasado oscuro. Están aquí prevenidos mis amigos. Les corresponde establecer sus reglas y sus futuros pero sepan que nada podrá ser como era desde tanto y tanto tiempo de iniquidad. Son bendecidos, cualesquiera que sean sus elecciones presentes, ya que son Luz, aunque elijan la otra vertiente no ascensional.
Paz a ustedes.
Jesús Cristo
Alteridad
Nota: Alteridad (del latín alter: el "otro" de entre dos términos, considerado desde la posición del "uno", es decir, del yo) es el principio filosófico de "alternar" o cambiar la propia perspectiva por la del "otro", considerando y teniendo en cuenta el punto de vista, la concepción del mundo, los intereses, la ideología del otro; y no dando por supuesto que la "de uno" es la única posible.
CRISTO
Traducción: Susana Milan - 9 febrero 2006
En este periodo pascual, que es tan querido a mi corazón, vengo a vosotros a confirmar la entrada total y definitiva del periodo de las grandes tribulaciones, del periodo en que toda alma humana va a tener que hacer las elecciones en su evolución futura. Creed que ni yo ni ningún otro ser de la Luz eterna vendrá a juzgar vuestras elecciones. Pero conviene de una vez por todas, y de manera definitiva, concretar vuestras elecciones. Algunos de vosotros en este planeta diríamos que, serán puestos frente a ultimatums, para elegir irremediablemente entre la Luz y las vías de la encarnación. En efecto, acabamos de acceder a la apertura de una ventana cósmica extremadamente importante en la evolución de este planeta que es tan querido a mi corazón. Hoy en fin, podemos afirmar la entrada en el periodo de tribulaciones que describió mi divino amigo San Juan, como vosotros lo habéis llamado.
Entráis definitivamente en el periodo en que vais a ver en el exterior cómo se confrontan ciertos elementos: la oposición entre la sombra y la Luz, la oposición entre las fuerzas vivas de la Luz auténtica que deben conducir a la emergencia de una nueva consciencia y también de un nuevo paraíso en este planeta. Estas fuerzas, que son queridas a mi corazón, van a oponerse a la falta de Luz, a las fuerzas involutivas ligadas a la evolución de la tercera dimensión en la que vosotros estáis desde hace tanto tiempo. Estas fuerzas van a hacer todo, creedlo, para impedir que eclosione esta Luz en vuestros corazones y en este planeta. Y no obstante, es importante comprender que ese combate, esa lucha que tendréis que librar es algo que está escrito desde la eternidad, como dije durante mi vida y como hoy os ha presentado a todos, nuestro divino Padre. Tendréis claridad total en vosotros mismos, de las consecuencias de vuestras elecciones.
Y creed que toda alma hará su elección con conocimiento de causa. No habrá palabras que puedan elevarse y decir “yo no sabía”. En ningún caso será posible. Cada alma será confrontada a sí misma. Cada alma, durante los meses y semanas, igualmente hará sus elecciones. Pero este periodo de elección es el más importante porque es probatorio. Es el que os conducirá a afirmar definitivamente las orientaciones que han tomado vuestras vidas, para algunos de vosotros desde hace mucho tiempo y para otros más recientemente. No obstante, no hay juicios por nuestra parte. Y cuando menos, incluso San Juan ha hablado del juicio final, del pesaje de almas, esas almas llamadas elegidas que subirán al Cielo son las que evidentemente, habrán hecho la elección por sí mismas. Nadie podrá forzar a nadie.
Cada ser será libre en su alma y consciencia de elegir la vía de la liberación o la vía del encadenamiento. Ciertamente, algunos de vosotros podrían decirse: « ¿cómo se puede elegir el encadenamiento más que la libertad? » Buena pregunta. Pero sin embargo, hay que comprender que las almas conciben en un momento dado de su peregrinaje la noción de encadenamiento, la noción de placer y de alegría, como algo esencial en su experiencia. En algún caso vosotros no podéis prejuzgar o juzgar lo que sea, no hacer nunca juicios de valor, cualquiera que sea el camino que ha emprendido un alma que, podría ser calificado de enemigo, o de amigo. No olvidéis que el enemigo más opuesto a lo que sois vosotros es no obstante, vuestro hermano; simplemente su camino difiere del vuestro.
En eso está la grandeza de alma, en comprender que Dios Padre siendo sin limitación alguna, el Hijo es el que va a confrontar su camino de evolución (que yo he presentado hace dos mil años) y debe también ser sin limitación alguna. A partir del momento en que vosotros observáis una persona un acontecimiento o cualquier cosa que no pertenece a vuestro campo de coherencia, a vuestro campo de cohesión, a vuestra vida, salís del camino del Amor que yo he trazado. Vosotros salís del camino de la Unidad que el Padre ha querido para vosotros. Es muy importante comprender esto. Y sobre todo en los periodos de elecciones o confrontaciones, en que las tensiones, pueden hacerse enormes. Los acontecimientos que se desarrollan ahora en la superficie de este planeta no están para castigar, sino para despertar. Son la retribución justa de las acciones insensatas y comprometidas por la locura de los hombres, la carrera por la competencia, la conquista de la moneda, la carrera por el dinero como vosotros lo llamáis, la carrera desenfrenada por la dominación de su hermano y de otros pueblos que están en camino en este planeta.
Hoy como siempre, de una forma ciertamente más cercana, la naturaleza entera grita « stop ». Los reinos de la vida al completo proclaman su disgusto pronunciado por esta voluntad de meter mano de algunos hombres que van más allá de los límites que han sido asignados, por los juegos asociados a la encarnación en la tercera dimensión. Conviene comprender que hoy, la Tierra debe manifestar y los reinos que la habitan, también, la resultante de las acciones pasadas que corresponderán no a un castigo os lo digo, queridos niños, sino verdaderamente a una liberación y a una potencialidad enorme como jamás ha existido: revelar al ser humano su potencial Divino, enfrentarle a sus responsabilidades, cara a sus elecciones, cara a lo que ha soportado, comprendido, esperado y sobre todo temido. Es muy importante comprender esto para no hacer juicios en el momento oportuno, no apuntar con el dedo a aquél que no haya hecho la elección correcta porque, quien sabe si vosotros mismos, en el momento de la elección acertaréis a hacer la elección adecuada.
En efecto, hasta el último minuto de elección presentado por el Padre, hay una oportunidad de ser rescatado, de volver atrás. Pero cuando la elección final está aquí, en ese momento elegir se hace irremediable y definitivo y no está sujeto a cambio. E induce al alma a una polaridad de vida que sueña de alguna forma, sus posibilidades de manifestación de evolución de potenciales en los 200 000 próximos años. Es muy importante comprender esto. Verdaderamente, tenéis que vencer en vosotros ciertas limitaciones. Estas limitaciones han sido forjadas por las encarnaciones pasadas que habéis afrontado, experimentado, desarrollado pero también por todos los deseos que habéis forjado (deseo de éxito, deseo de dinero, deseo de ser visto), deseo, deseo, siempre la misma palabra.
Ahora, el paso al Paraíso en la Tierra se acompaña necesariamente de un abandono total de todos los deseos de manera que en el momento oportuno o, como el crucificado que yo fui, podáis decir: “Padre hágase tu voluntad y no la mía”. Esto requiere abandonar totalmente vuestros deseos, abandonar totalmente vuestras proyecciones, vuestros anhelos, vuestros deseos y vuestras predisposiciones a ir hacia la posesión cualquiera que sea. Esto no es una actitud mental, una actitud afectiva, emocional, sino verdaderamente una decisión lúcida y última del alma que, debe llevaros a plantear los actos fundadores de vuestra nueva vida bajo nuevos cielos y sobre una nueva Tierra. Comprender esto es muy importante. En el momento de la elección nada debe perturbaros. Sólo aquellos que tengan la fuerza de alma serán capaces de renunciar a sus adquisiciones, de renunciar a la familia, a lo que haya en su bolsillo, a lo que haya en su cabeza, a lo que haya en su corazón, de forma que pueda hacerse como un niño, para aceptar penetrar el reino de los cielos tal como lo anuncié hace dos mil años.
Es muy importante comprender también con el corazón y no con la cabeza que la elección es una experiencia última que solo ocurre excepcionalmente en la superficie de este planeta, tanto más porque, cosa todavía más rara, nuestro planeta, vuestro planeta en el que vivís va a acceder a su dimensión transcendente que hará de él un planeta sagrado. Ahora, los únicos que podrán pisar su suelo serán aquellos que hayan hecho la elección de ser sacralizados. Las elecciones, en ciertos casos, podrán ser tremendas y dolorosas. Pero creed, que cualquiera que sea la elección que vosotros hagáis, seréis bendecidos de todas formas. No habrá remordimientos. Sólo habrá que asumir vuestras propias responsabilidades, vuestras propias decisiones. Ahora, en las semanas y los meses que vienen, muchos seres van a entrar en rebelión, van a entrar en el sufrimiento extremo en relación a lo que viene. Esto no se debe a la voluntad del Padre, ni a la mía sino evidentemente, a los frenos y las resistencias y yo diría incluso, a las cortapisas que se han puesto a la emergencia de la Luz en su alma. Estas almas tratarán de arrastrar con ellas a algunos seres a lo que podríamos llamar realmente una caída, una regresión y una vuelta a esquemas involutivos muy poderosos. Eso no va con vosotros.
Pero sabed que esta lucha ocurre en alguna parte en el fondo de vuestro ser, la lucha contra el materialismo y la espiritualidad. ¿Seréis capaces de espiritualizar vuestra materia? ¿O al contrario de materializar vuestra espiritualidad? Es vuestra elección queridos hermanos, os concierne hacer buenas elecciones con toda lucidez. Evidentemente tendréis la conciencia absoluta, la lucidez para hacer las elecciones. Esta elección no lleva contrariamente a lo que algunos de vosotros podríais pensar, al advenimiento del fin de los tiempos. Eso corresponde a un periodo mucho más tardío en vuestra historia. No obstante, los actos y los fundamentos puestos comportarán algunas modificaciones de vida muy importantes y la aparición de nuevos dones que se han predicho desde mi encarnación: la impresión, no únicamente la impresión sino sobre todo la capacidad de visión doble, el acceso a los mundos espirituales se os ofrecerá en esta ocasión. Evidentemente os convendrá luchar también, contra las fuerzas involutivas que intentarán conduciros a un periodo anterior de elección. Esto no es posible, queridos niños. Os concierne hacer la elección.
Una vez que la elección de la Luz sea hecha, sólo podréis obrar en el sentido de la Luz. Vosotros, sólo mediante vuestro ejemplo de radiación, podréis llevar a seguiros a los seres todavía indecisos al momento de su elección. Conviene entonces cultivar esa certeza, esa fe total en la Luz, en el amor, en la Unidad del Padre y del Hijo, porque vosotros sois también, el Hijo que va a encontrar al Padre. En esto no hay ninguna metáfora, ninguna imagen sino la realidad de lo que sois: los hijos del Padre, los hijos de la Luz y los hijos del Uno. Vosotros sois el único, totalmente en vosotros. Os conviene por eso, aceptar esta dimensión sublime de lo que eráis desde hace mucho tiempo y que hoy debéis volver a ser.
Este es el mensaje que tenía que daros en este periodo pre-pascual para aportar en vuestro corazón la certeza de vuestra Divinidad, la certeza de la Luz, y en todo caso la certeza de vuestro camino. Ahora, permanezco con vosotros todavía un poco de tiempo para saber si cada uno de vosotros tenéis una cuestión particular que hacerme y a la que pueda responder. Así os escucho.
Pregunta: ¿cómo liberarse del ego?
La única forma, desde el discurso que he empleado, de liberarse de su ego durante esta fase decisiva, consiste en dejar actuar en sí mismo la voluntad del Padre, abandonar toda veleidad de deseo, toda veleidad de plantear acciones y dejar actuar al cielo en sí, abandonar toda resistencia. Ahí, se sitúa la resolución del ego. Ahí, se sitúa la resolución de las oposiciones ligadas a la encarnación en la tercera dimensión. No hay otra alternativa que dejar actuar en vosotros la voluntad de la Luz. ¿Es clara la respuesta, querido hermano? La voluntad que tendréis todos vosotros a estar todavía más motivados en el camino serán los acontecimientos que observaréis en el exterior, en torno a vosotros, en la superficie entera de este planeta. Seréis confrontados a acontecimientos que os harán llevar las elecciones con todo conocimiento de causa. Viendo las imágenes, escuchando las agitaciones, comprenderéis real y sinceramente las elecciones que debéis hacer. No podréis, al contrario de aquellos que serán confrontados a estos acontecimientos en diversas regiones del globo decir que vosotros no sabíais, porque tenéis la suerte de ser los privilegiados observadores desde el exterior, de algunos acontecimientos traumatizantes que sobrevendrán. Esto reforzará vuestra voluntad de Luz, y vuestra voluntad de liberación, estad seguros.
Pregunta: ¿cómo tener la certeza de la justeza de nuestros actos?
No hay certeza de tipo matemático, querido hermano, en el sentido humano. La certeza no se encuentra en la realidad de este plano. No hay concordancia total entre lo que pasa en el Cielo y lo que pasa en la Tierra. La única forma de tener certeza es la coherencia interior, no la justeza de los resultados sino la certeza interior en el corazón. Lo que dice tu corazón es la verdad, lo que dice la Luz es la verdad también, cualesquiera que sean los obstáculos y Dios sabe si son muchos en estos tiempos del fin. Conviene al menos, estar lúcido sobre la voluntad de la Luz. A partir del momento en que dejáis totalmente las nociones del ego, a partir del momento en que dejáis la noción de voluntad personal, a partir del momento en que dejáis hablar a vuestro corazón, a vuestra alma, se hace evidente que estáis en la verdad. No obstante, a partir del momento en que vosotros observaréis lo que pasa en el exterior, seréis confrontados a un cierto tipo de elementos sobre los que yo no me extenderé, tendréis frente a vosotros las capacidades de emoción total a nivel del corazón, de comprensión de quienes sois.
Pregunta: ¿en qué periodo tendremos que hacer estas elecciones?
Habéis entrado en el periodo de las tribulaciones, y es por un periodo de dos años, dos años y medio, durante los que los acontecimientos se van a suceder en el exterior y en el interior de vosotros. Seréis confrontados a vuestras propias sombras pero también a las sombras planetarias. Conviene durante este periodo, hacer las elecciones pero también afirmar vuestra Luz, crecer en Luz, crecer en verdad, crecer en espíritu. Los potenciales espirituales que estaban apagados en la mayoría de los seres humanos van a volver a desarrollarse en su total magnificencia a medida de vuestro reforzamiento de Luz. Os transformaréis realmente en seres multidimensionales y, esto muy próximamente, ya que algunos entre vosotros tienen ya la percepción ultrasensible de otros mundos, de otras dimensiones. La duda querido hermano, forma parte del camino. Aquél que no duda, que no se hace preguntas jamás, está en el ego, en la ilusión de la certeza total de su vida. Algunos de los discípulos que han estado encarnados entre mi vida y vuestra época, han manifestado en un grado u otro este periodo de dudas, cualquiera que sea la fe que los anima.
Pregunta: ¿en este periodo difícil, a quién invocar para encontrar consuelo?
La invocación es una palabra muy grande, la oración es una palabra grande, la meditación también es una palabra grande. Simplemente se os pide estar vivo, estar en vida, estar consciente de cada minuto de la totalidad de la Divinidad que sois. A partir de ese momento, todo acto planteado será un acto justo. No puede haber en esta situación, independientemente de las dudas inherentes a la condición humana y a la condición de vuestro aparato intelectual y mental, no puede haber traición o equivocación de lo que dice vuestra alma, de lo que dice vuestra vida, incluso si esto y yo lo admito, es un periodo extremadamente difícil. Entonces, la palabra invocación es un poco fuerte. Conviene simplemente estar vivo e ir en el sentido de la vida, ir en el sentido de la expansión de los nuevos potenciales del ser humano que vais a ser. Ser uno mismo, estar lúcido y consciente a cada minuto que pasa, no dejarse llevar por lo que concierne a las emociones, por lo que concierne a las ideas, a los pensamientos, a las formas, de cualquier forma, “divisiones”. La realidad de la vida se basta a ella misma. La realidad de la acción en el momento más oportuno es ciertamente la cosa más importante para permitir el pleno florecimiento de vuestro potencial de Divinidad. Permanecer lúcido. Permanecer consciente en el instante. Abandonar toda resistencia y dejar hacer a la voluntad del Padre.
Pregunta: ¿cuál es o cuál será vuestro papel en estas tribulaciones ?
Yo sólo intervendré, querida amiga, querida hermana, al final de las tribulaciones. No obstante, mi presencia se manifestará en un momento dado, a cada alma en camino preparada para hacer la elección de la Luz del Padre y del camino Crístico. En esto yo intervendré individualmente, en este periodo de tribulaciones. Mi rol se activa después del momento en que se produce lo que habéis llamado en vuestro mundo, el fenómeno de ascensión, que está descrito en el evangelio de mi Santo-Hijo.
Pregunta: ¿podría definir a qué corresponde vuestro tipo de energía?
Querida niña, querida hermana, YO SOY la vía, YO SOY el camino, la verdad y la vida. En esta frase única, yo asumo totalmente que YO SOY. Aquél que desea encontrar el camino del Padre solo puede pasar por mí, no hay otra alternativa. Yo no hablo aquí de religiones que han sido construidas en mi nombre. Yo hablo de la ilustración de mi camino pero también de mi canal, en todos los sentidos del término. En mi camino, mi verdad, mi vía, está el último mensaje vinculado a la dimensión del Padre. Considerarse como un niño, considerarse como el Hijo del Padre, es donde se sitúa el camino que he mostrado, que yo he ilustrado. En tanto que Rey de este planeta conviene mostrar el camino que conduce al Cielo, al Padre y a las dimensiones que vosotros llamáis “superiores”. Nadie puede penetrar el reino de los cielos si no se vuelve como un niño. Nadie puede penetrar el reino del Padre sin pasar por mí. Cuando yo digo “yo”, no se trata de mi presencia encarnada, ni de modelos creados por las religiones, sino evidentemente de un modelo vibratorio característico que se llama filiación.
Pregunta: ¿cómo os situáis en relación a Orionis?
Orionis es el regente. El Regente es aquél que organiza, que dirige un esquema evolutivo. Mi encarnación y mi sacrificio ha estado simplemente destinado a recordaros vuestra inspiración divina y a mostraros la vía y el camino, la verdad y la vida que YO SOY. En esto, YO SOY el intermediario, no Melkisedec, no de la orden de Orionis, no de cualquier grupo, sin embargo, yo obro en la propia Luz que es la Luz de la Unidad, la Unidad del Padre, la Unidad de la Luz. Por eso, YO SOY aquél que es vuestro canal hacia el Padre.
Pregunta: Miguel nos ha precisado que nombrándole Almala, con la repetición de las tres «a», había una resonancia vibratoria directa con su energía. ¿Hay algún nombre que nos ponga en resonancia vibratoria directamente con vos?
Querida hermana, querida niña, la vibración es extremadamente importante. Una vibración que es formulada por un ser lleno de Luz y la vibración formulada por un ser lleno de sombra, ¿atrae necesariamente la misma vibración? Así, en lo que concierne a mi nombre sagrado de Sananda, que ha sido utilizado en diferentes grupos, igual que el nombre Cristo que me han dado, esta palabra ha sido desviada. Si decís Cristo, ¿es ese Cristo el que se manifiesta? Si invocáis Sananda ¿es Sananda el que se manifiesta? Esto depende de vuestra afinidad vibratoria. Ahora, esta lógica de las tres “a” siempre ha sido fundamental en lo que concierne a los seres de Luz. Pero en lo que concierne a mi canal de Luz, os propongo conservar la apelación y las elecciones que son el origen primero de mi nombre.
Pregunta: ¿qué diferencia hacéis entre ser de Luz y canal de Luz ?
YO SOY ser y canal de Luz. Por mi canal, vosotros accedéis al Padre. Os preservo en el camino de las desviaciones que pueden manifestarse, ligado a las trampas de poder del alma una vez que éstas sean reveladas. El canal es un lugar por el que debéis pasar para acceder a otra cosa, sin pasar necesariamente por el ser que YO SOY, sino por el canal que yo represento.
Pregunta: ¿qué ritual se puede utilizar para invocaros más eficazmente?
La evolución de la Luz comprended, no es la misma que en el momento de mi venida a la Tierra. Vosotros estáis hoy, frente a vosotros mismos, frente a lo que se llama vuestro propio libre albedrío, no es que seáis libres sino a vuestra propia elección y también, a vuestra propia maestría. Los rituales que formaron parte de la historia de la humanidad desde un pasado muy reciente, digamos que hasta el siglo dieciséis que estaban ligados a la religión profundamente, se han disuelto. Esta relajación y esta disgregación han permitido la manifestación de ciertos poderes diferentes de la Luz. Ha sido necesario y obligatorio para que el hombre llegara a comprender que debía sobrepasar la noción de los rituales, la noción de las oraciones, la noción de las meditaciones para acceder al corazón, a la esencia, para acceder a su esencia central. Y esto con toda lucidez, sin esfuerzos particulares y sin rituales complicados. Así, hoy más que nunca, se os pide que abandonéis todos los rituales y dirigiros realmente a la autenticidad de vuestro ser, porque, al estar centrados en vuestro corazón, al estar alineados con la dimensión de “YO SOY ”, con la dimensión de Jeshua, os convertís vosotros mismos, en ese ser divino del que yo hablo, que no tiene necesidad de ningún ritual sino que es simplemente “YO SOY”.
Pregunta: ¿cuáles son vuestras relaciones con la intra-Tierra?
Nosotros podríamos llamar a los seres de la intra Tierra, en mi caso sobre todo, los «aduaneros» que verifican cada vez, mis idas y venidas, mis retornos al plano dimensional para entrar en contacto con algunos de mis canales, algunos de mis médiums. Cuando yo llego, yo digo realmente aquél que yo digo que YO SOY , y no cualquier otra entidad que llegara de planos intermedios. Así, ellos son los guardianes, son los guardianes del plano dimensional.
Pregunta: ¿en vuestra encarnación habéis tenido descendencia?
Evidentemente he tenido descendencia, he tenido dos hijos. No se podía ser Rabbi, en la época de mi encarnación, si no se estaba casado. Y bien, evidentemente yo lo estaba. Muchas cosas han sido profundamente deformadas. Estos son los datos históricos que tienen poco que hacer con lo que vais a vivir.
Así, queridos amigos, va a ser tiempo de que alivie el canal en el que estoy. Permitidme queridos niños, queridos hermanos y hermanas, aportaros todas mis bendiciones, todo mi amor. Os amo.
Jesús Cristo
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