Recibido por An’anasha –11 de Noviembre de 2010.
-An’anasha: Queridos Hermanos:
Hoy, esta meditación anterior ha sido muy impresionante ¡muy emotiva! porque, ya para terminar la meditación con nuestra amorosa Gaia y con todos los Yo Superiores de la Humanidad, despiertos y dormidos, en un momento dado me convertí en un solo corazón con mi Madre Tierra, con el corazón del Padre Creador, con los latidos de todos los seres que empezamos a latir al unísono, en un solo corazón inmenso, gigante, en el cual predominaba la fuerza de los latidos del corazón de Gaia, y cuando ya iba a terminar la meditación, con mis ojos cerrados, empecé a ver una luz rojo-dorado muy intensa y sentí que estaba conectada directamente con Su corazón y muy intensamente empecé a sentir el dolor que Ella sentía en ése momento -y durante horas, no he podido parar de llorar-.
La Tierra me ha transmitido todo el dolor que siente. Ella está reteniendo, está retrasando y está retardando los movimientos que tiene que hacer, porque sabe que muchísimos de sus hijos van a sufrir, y Ella como madre que es, no quiere hacerlo…. ¡Ella está en una dualidad muy impresionante!… Y me está diciendo
“¿Me muevo… no me muevo?… ¡¿Hago daño… me hago daño?!... ¿Qué puedo hacer?...
¡Me muestra su cuerpo también adolorido!... ¡su cuerpo muy dañado, hasta sus propias entrañas!... y desde su Amor de Madre, me muestra también miles de cuerpos humanos muy adoloridos y dañados hasta sus entrañas… y a la creación exactamente igual… Casi no hay nada sano, ¡es como una visión apocalíptica que tengo en éste momento, que me la está mostrando Gaia!… ¡me está hablando con imágenes y también con palabras, que llegan directamente a mi corazón, y a cada instante lloro más!… …… ¡estoy unida directamente con su corazón y con su cuerpo!, ¡estamos unidas!… ¡me lo está mostrando y me está haciendo sentir, exactamente todo lo que Ella siente!… Me muestra lo que la humanidad hemos hecho durante tanto y tanto tiempo, sin siquiera tener un sólo sentimiento de amor, ternura y de gratitud hacia ella…
Ella me dice que nos lo ha dado todo, desde nuestro cuerpo que sale de su esencia y después cuando partimos nos lo recibe, lo recicla y lo prepara para la siguiente encarnación. Que cuando decidimos llegar de nuevo, muy poco cambiados de una reencarnación a otra, continuamos haciendo las mismas cosas y a veces todavía peores y pensamos que nunca tenemos que cambiar, que no nos interesa evolucionar, que no estamos interesados en avanzar y dejar todo lo negativo atrás…y ésto es lo que hace daño al corazón de nuestra madre Tierra, continuamos haciéndole daño, haciéndonos daño, y ése daño que nos hacemos le duele también a ella… Me dice que yo también soy madre y que cualquier daño que mi hijo se haga, cualquier cosa que padezca, daña mi corazón, y exactamente eso también le pasa a ella. Que nosotros no somos conscientes, que solo la vemos como un simple planeta, pero ella es un Ser vivo, que ama y siente, que nos recibe sobre su piel y que nos da todo gratis, que nos da toda su belleza, toda la abundancia, un regalo diario de todo lo que necesitamos, pero nosotros no estamos conscientes de ésos regalos que ella cada día nos da; que ni siquiera somos conscientes del alimento que tomamos, porque estamos sentados frente a la televisión alimentándonos de violencia y negatividad y jamás agradeciendo la energía de todos esos elementos que han dado su vida, su esencia y sus frutos para nosotros, para que “la especie humana, los evolucionados, los seres conscientes” que caminamos sobre el planeta, tengamos salud y energía y podamos seguir realizando lo que estamos haciendo.
¡Cuánto dolor, cuanta tristeza hay en el corazón de Gaia!... ¡Ella está llorando también y ésas lágrimas llegan a mis ojos y ése dolor también daña mi corazón!... ¡ésto es muy intenso!… ¡esto es muy intenso!...¡jamás lo había sentido de ésta manera!... y me dice… ¡que tengo que comunicarlo a ustedes; que tal como lo estoy sintiendo, lo ponga en palabras y se lo comunique a todos ustedes!…
Dice que nos está dando plazo, dice que nos está dando tiempo, que se está sacrificando una vez más, aguantando tanto dolor para no hacernos daño y esperando que cada vez mas humanos tengamos consciencia, cambiemos, avancemos, y demos un paso más hacia la luz, el amor y la compasión que debemos tener hacia ella, hacia nosotros mismos, hacia toda la humanidad y toda la creación.
Me dice que aprovechemos éste tiempo extra que nos está dando, porque el cambio va a ser muy grande en el planeta, que no quiere escuchar los lamentos de tantos hijos que van a padecer… Que los que se van, no van a sufrir, pero los que nos quedamos sí… Que para eso estamos aquí, preparándonos para tener la fuerza y la valentía necesarias para poder convertirnos en apóstoles, que vamos a tomar de la mano a tanta gente desesperada… ¡Es un caos el que me muestra!… ¡es un caos!… ¡mucho dolor, mucha desesperación, mucho llanto, muchos gritos!… ¡Los Humanos desesperados corren sin saber para donde ir!... ¡Y nosotros tenemos que estar ahí… manteniéndonos como los Guerreros de la Luz que somos!… ¡En pié, moviéndonos al ritmo que ella se mueve, latiendo nuestro corazón al unísono con su corazón!… es un evento muy…… son eventos, porque van ser varios, muy difíciles, fuertes, muy dolorosos para todos nosotros…
Nuestra Gaia me pide que nos preparemos… ¡Dice que los resultados no son los que ella esperaba, que nos ha esperado mucho y que ya no puede más!…. Me muestra un corazón, que es como un corazón que está fallando y tiene que ser atendido de inmediato, porque si no lo atienden, el ser humano muere… ¡Pues así le está pasando a ella!… ¡Su corazón está fallando y ella no puede permitirse eso!… Entonces tiene que aceptar la ayuda que está recibiendo de nuestro Padre-Madre-Creador, de nuestro Jeshua, Miguel, y de todos los Maestros ascendidos, la Gran Hermandad Blanca, los Ángeles, Arcángeles y todos nuestros Hermanos de las estrellas que están aquí, listos y esperando a que ella tome la decisión, porque solamente Ella puede hacerlo; por eso todas las predicciones fallan, porque su Amor de madre cada día nos da alargues y más alargues, esperando que reaccionemos, pero, cada día que termina para Ella es una desilusión… Por eso ahora nos pide que por favor nos preparemos, porque en cualquier momento, va a recurrir a ésos movimientos tan fuertes, que la van a liberar de tanto dolor… ¡Me dice que nos pide perdón, pero que su cuerpo ya no resiste, que durante muchísimo tiempo ha llevado una carga demasiado pesada… y que está muy cansada!…
Me dice que hasta mañana, que me da las gracias, por ocuparme de su cuerpo y de su corazón cada día, enviándole jazmines perfumados para que la acaricien con su perfume… que me ama, que continúe adelante consintiéndola cada día con esta meditación y que hable con nuestros hermanos de los Grupos-Círculos para que todos asuman este trabajo. Desde el corazón nos manda a decir que unamos nuestros corazones con el de ella en cada meditación y que sintamos que los latidos de nuestro corazón son uno con el de ella…
Hasta mañana amorosa Madre Tierra Gaia, Te amo… Lo siento mucho, perdóname, gracias y te amo… An’anasha y hasta mañana.
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