Quizá
sientan que todo se ha estancado, que todo lo que hacen podría parecer que se
hace en vano.
El
cansancio les invade y en momentos, llega la desesperación y quisieran dejar
todo.
Hoy
vengo a decirles que estoy con ustedes, que el cambio ha comenzado y no hay
marcha atrás, que todo ha sido escuchado y les amamos por este maravilloso
servicio que eligieron por hacer.
Todo se
mueve y se hace para su más grande bien, el momento es ahora, es momento de
recibir todas las bendiciones que ya tienen esperando por ustedes.
Hagan
un alto en su camino, la fuerza la tienen; llénense del amor del Creador que es
lo único que importa y que necesitan y llénense de mi amor incondicional, de mi
amor de madre.
Yo les protejo,
Yo les bendigo su andar.
Les
amamos
Su Madre María
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