YESHUA
~ CRIANZA Y PODER
Canalizado
por Mercedes Kirkel
Traducido
por Laura Ticó Apreza
05/07/2018
Pregunta: Tengo un problema con mi espiritualidad que
concierne a mi hijo. Él tiene cuatro años y creo que es increíble desde un
punto de vista espiritual. En mi corazón siento que necesito respetarlo y
amarlo por lo que es. Pero me resulta muy difícil porque me siento confrontado
con la idea de que necesito guiarlo y tener cierta autoridad sobre él, lo que
no coincide con mis ideales espirituales.
¿Cómo equilibro guiar a mi hijo sin querer cambiarlo o
decirle quién debe ser y cómo debe actuar?
Yeshua: Me conmueve responder a tu pregunta.
Lo primero que debes darte cuenta es que tu hijo es un
espejo para ti. Ese espejo puede mostrarte los lugares en los que estás
luchando contigo mismo, con los que no estarías en contacto si no fuera por tu
hijo, o tal vez no tan fácilmente.
Como mi amada María Magdalena ha aclarado, una parte
principal del crecimiento y enfoque en la tercera dimensión tiene que ver con
el poder. Estás luchando con tu relación con el poder. Esa es una lucha
intensa. No se trata simplemente de cómo ser un buen padre. Se trata de cómo ir
más allá de los límites de la tercera dimensión en su totalidad, donde la vida
no se trata de poder, donde el poder se utiliza para apoyar a todos, no para
controlar a algunos en beneficio de los demás. Este es un gran aprendizaje para
los seres humanos y viene en esta forma particular en tu vida.
En última instancia, debes llegar a la raíz de tu
conflicto, que es tu conflicto dentro de ti sobre el poder. Es muy probable que
haya heridas y se requiera una sanación.
También hay un abrazo del poder de tu hijo, con el que
quizás no estés completamente en paz.
Aquí es donde todos se dirigen, para aprender a estar en el
poder juntos por el bien de todos. Hay un empoderamiento de tu hijo y hay un
empoderamiento de ti mismo. No están en conflicto entre ellos, pero puede
parecer de esa manera.
Eres el guardián divino de tu hijo y eso incluye, a veces,
establecer límites apropiados. Los niños no necesariamente disfrutan de esos
límites en el momento, pero generalmente son reacciones de corta duración. Si
no son reacciones de corta duración, está sucediendo algo más profundo.
La tercera dimensión está llena de límites. Parte de su
trabajo como padre es ayudar a tu hijo a superar los límites.
Una vez más, como padre, cualquier tema con el que tengas
problemas o tengas un desafío en relación contigo mismo aparecerá en tu
relación con tu hijo. Eso puede ser un gran beneficio. Puede ayudarte a darse
cuenta y llegar a la claridad acerca los lugares en los que puedes necesitar
centrarte para tu propio crecimiento, así como para el bien de tu hijo. Esta es
una de las grandes bendiciones de ser padre.
La mayoría de los padres aman a su hijo, aunque a veces,
por supuesto, puede ser difícil. Puedes olvidar tu amor; pero en general, hay
amor allí. Ese amor te motiva por el bien de ambos.
En última instancia, tu trabajo como padre es ver la
divinidad en tu hijo y ver la divinidad en ti mismo. Cuando llegas a ese lugar,
lo resuelves como dos seres divinos.
¿Hay algo más acerca de esto?
Interlocutor: Creo que tu respuesta fue acertada y tengo
mucho que procesar. Te agradezco mucho.
Yeshua: De nada.
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